La historia de carreras vencidas por un vehículo Mercedes son cuantiosas, especialmente en la mitad de los años 30. Si nos centramos en los años comprendidos entre 1934 y 1939, observamos como la marca creó coches que fueran capaces de superar cualquier registro que estuviera establecido en ese momento.
En primer lugar, tenemos al Mercedes W25, cuyo debut se produjo en el archiconocido circuito de Nurburgring el 3 de Junio de 1934, consiguiendo proclamarse campeón en su primera carrera. La evolución de este vehículos fue el W125, equipado con un motor de ocho cilindros en línea de 5.6 litros sobrealimentado, proporcionando una potencia de 600 CV. El vehículo fue diseñado por una de las personas que han marcado la historia de Mercedes: Rudolf Uhlenhaut. Habrá gente que no lo conozca, pero tal vez si os decimos que fue el encargado de diseñar el Mercedes 300 SLR, os comienza a sonar algo.
Cuando en 1938 se cambiaron las normas de los grandes premios, limitando el motor de los coches participantes a 4.5 litros no sobrealimentados, se desarrolló el W154, equipado con un motor de 3 litros V12 que proporcionaba la cifra de 430-480 CV.
En el año 1939 se desarrolló un vehículo diseñado específicamente para el Gran Premio de Trípoli. Con las restricciones impuestas para esa carrera, Mercedes construyó el W165 en tan solo 8 meses, equipándolo con un motor V8 de 1.5 litros y proporcionando una potencia de 254 CV, lo que le permitió alcanzar los 272 Km/h.
Mercedes aún cuenta con algunos récords en su haber, como el que ostenta el W125 de 1938: récord de velocidad en la vía pública, con 432,7 Km/h. Y cuando Zeppelin colaboró en el diseño de la aerodinámica de los vehículos de Mercedes, consiguieron mejorar notablemente su rendimiento y su valor Cx. A pesar de ello, no estuvieron exentos de problemas, ya que los 736 CV proporcionados por el motor de 5.6 litros de 12 cilindros, permitían alcanzar la velocidad de 400 Km/h, haciendo que el coche se levantara de la parte delantera. Para solucionarlo, los diseñadores tuvieron que modificar el paragolpes delantero, disminuyendo la entrada de aire y colocando una cesta con hielo para enfriar el motor.
Para terminar, uno de los vehículos de Mercedes que quizás sea el más curioso de todos es el T80, un coche con una longitud de 8,24 metros de largo, con 6 ruedas y equipado con el motor de un avión, proporcionando la bestial cifra de 3.500 CV y permitiendo que el coche alcanzara la velocidad de 595 Km/h en la salinas de Utah.
En el post original encontrareis cantidad de fotos de los vehículos aquí nombrados.
Ignacio Sánchez
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